Salud,
Os escribimos en relación a vuestro correo electrónico del 2 de mayo que, a su vez, habéis difundido ampliamente en vuestros medios y en el que nos acusáis de injurias contra vuestra organización.
El llamado patrimonio histórico, como decís acertadamente en vuestro escrito, fue fruto de la abnegación y el sacrificio de las masas obreras combativas del Estado español que conformaron la CNT en las primeras décadas del siglo pasado y pertenecía por lo tanto a la masa de estos trabajadores sindicalistas, anarquistas y no anarquistas. En la CNT actual los no anarquistas no tienen cabida real: teóricamente se pueden afiliar pero… “los miembros de partidos políticos (…) no pueden emplear el sindicato como foro de propaganda ni ostentar cargos” (www.cnt.es , ¿Qué es la CNT?), así que los grupos anarquistas tienen la única y exclusiva prerrogativa de dirección y propaganda de sus ideas. Los estatutos actuales dejan claro que “artículo 1- (…) su carácter es anarcosindicalista” , “artículo 2- b) fomentar entre los trabajadores (…) asumiendo los medios de producción y consumo de forma autogestionada implantando el comunismo libertario”, “artículo 18- los afiliados que, a su vez, sean miembros de un grupo político (…) no podrán representar ni ocupar cargos de gestión en la organización”. Nada de esto aparece en el Congreso Constituyente de la CNT en 1910, ni en el siguiente Congreso, siendo conocido que los anarquistas propiamente dichos representan entonces sólo una de las corrientes (ni siquiera mayoritaria) que confluyen en la CNT. Y por cierto, tampoco aparece nada de esto en los estatutos de 1977 antes de la lucha política interna que llevó al panorama actual.
Prosiguiendo en el tiempo, la Federación Anarquista Ibérica – FAI (que se le puede llamar como se quiera pero no es otra cosa que un Partido, un Partido político anarquista) fundada 17 años después de la CNT, esto es en 1927, tomó la Dirección de ésta y llegó al punto de disolver hasta los grupos de afinidad durante la Guerra Civil. Esta misma Dirección anarquista de la CNT (convertida en CNT-FAI) cogió los cargos en los Ministerios del gobierno burgués del Frente Popular junto a los estalinistas, restituyó al burgués Lluís Companys como Presidente de la Generalitat y puso al burgués Tarradellas como Presidente del Comité Central de Milicias Antifascistas. Esta misma Dirección anarquista de la CNT (en la persona de García Oliver como Ministro de Gracia y Justicia) decretó el desarme y disolvió las Milicias e impuso su integración en el Ejército burgués, esta misma Dirección (en las personas de García Oliver y Frederica Montseny) criminalizaba a “Los Amigos de Durruti” y exigía a los obreros combativos de Barcelona de mayo del 37 que dejaran las armas y abrazaran a los guardias de asalto mientras esta misma Dirección impedía que sus hermanos de clase que luchaban en el Frente de Aragón fueran a Barcelona para ayudarles. Esta Dirección y sus herederos no tienen ningún derecho a proclamarse herederos al mismo título de la masa de trabajadores que ellos mismos traicionaron y entregaron desarmados a la represión de la burguesía.
Después del franquismo, fue el Estado burgués quien decidió cuál de las organizaciones y tendencias en pugna representaba la continuidad legal con la CNT histórica.
Por otro lado, la realidad hoy es que la actual CNT-AIT (y no sólo ella por desgracia sino el resto de organizaciones que nos reclamamos de la clase obrera) no está en condiciones de poner en jaque al Estado, por lo tanto, la restitución del patrimonio histórico es una subvención, no es el fruto de una relación de fuerzas real. No entramos aquí en cuál es el proceso real por el cual habéis conseguido que el Estado de la Patronal recapacite y decida dar 2,4 millones de euros en 2006 y 7,3 millones de euros (2007) (http://www.tt.mtas.es/periodico/Laboral/200712/LAB20071221_4.htm) a una organización teóricamente revolucionaria. Esto lo podéis explicar mejor vosotros y deberíais hacerlo. Lo que nosotros no nos creemos es la historia que el Estado burgués ha caído en la cuenta de la “injusticia” de no devolver la infraestructura a una organización teóricamente revolucionaria y ha caído en la cuenta de que hay que dotar de medios (y 9,7 millones de euros no son pocos medios) a una organización cuyo fin teórico es la destrucción de este mismo Estado. Por otro lado, vosotros mismos afirmáis que el patrimonio histórico restituido es una ínfima parte, ¿hasta cuánto dinero puede recibir la CNT sin que pueda llamársele subvención? Sin contar con que las reclamaciones de CNT no se limitan al Patrimonio “histórico” sino también a la repartición “equitativa” del llamado Patrimonio Acumulado por el Sindicato Vertical.
http://sindikal.blogspot.com/2007/11/cnt-y-patrimonio-sindical-acumulado.html
http://ania.urcm.net/spip.php?article18523
http://figueres.cnt.es/ventdelpoble/epoca3_numero01/pagines_02-15_interiors.pdf
Los Estatutos de la CNT en su artículo 33 dicen:
“Capítulo VI.- Del Régimen económico Art. 33.- El Patrimonio económico de la CNT lo constituyen: – (…) – Los bienes de la F.A.L. y de la Editorial Confederal.”
Así que hay una ligazón orgánica de equivalencia entre la F.A.L. y la C.N.T., y los bienes de la F.A.L. son patrimonio económico de la CNT. Resulta que la F.A.L (Fundación Anselmo Lorenzo) obtuvo como mínimo que sepamos estas SUBVENCIONES con todas sus letras en el 2007:
http://www.boe.es/boe/dias/2007/07/05/pdfs/A29139-29141.pdf
http://www.boe.es/boe/dias/2007/07/06/pdfs/A29314-29317.pdf - para contratación de personal…
Y resulta también que en la F.A.L. están los famosos liberados que la CNT dice no tener:
http://fal.cnt.es/?q=node/598
http://fal.cnt.es/sites/all/documentos/ConvocatoriaBecasPatrimonio2009.pdf
No basta con decir que se hace algo para que sea verdad: hay que hacerlo.
Otra cosa que no deja de sorprender es la ausencia de cualquier información sobre la tajada proporcionada por el Estado burgués en los mismos medios de la CNT, ni rastro de información sobre los 7,4 millones del 2007. En varias webs de vuestra organización por el contrario se mantiene que el patrimonio sigue íntegramente en manos del Estado.
En Solidaridad y Unidad de los Trabajadores defendemos y practicamos que las organizaciones de la clase obrera tienen que hacer y tener en relación a sus posibilidades reales, al grado de organización que hayan alcanzado, a la situación general del compromiso, convicción y combatividad de nuestra clase porque si no tanto la organización como la actividad son artificiales e ilusorias y, en el mejor de los casos, no sólo nos engañamos a nosotros mismos sino al resto de nuestra clase. Nuestros locales y toda nuestra actividad sí que se pagan con las cuotas de nuestros afiliados sin que nadie cobre un duro por ello desde nuestra constitución hace 11 años.
Por ende, es sorprendente la facilidad y naturalidad con que ponéis el grito en el cielo y nos amenazáis cuando se señala un hecho material real y comprobable como son los 9,7 millones de euros que vuestra organización ha recibido en el 2006-2007 o las subvenciones de la F.A.L. o las becas para liberar afiliados de la CNT que en ella se dan, mientras que ni siquiera pestañeáis cuando en todas vuestras webs y publicaciones decís que sois la única organización que no recibe subvenciones lo cual NO ES VERDAD. No sólo porque, insistimos, el patrimonio histórico es una forma de subvención que además no dais por cerrada, sino porque sabéis perfectamente que Solidaridad y Unidad de los Trabajadores no ha recibido nunca subvenciones en ninguna de sus formas y decir que CNT es la “única” sí que es una INJURIA al resto de organizaciones que no recibimos subvenciones. Pero esto no se os pasa ni siquiera por la cabeza porque las sagradas siglas de CNT lo justifican todo y nadie puede hacer ninguna crítica a sus acciones pasadas y presentes, mientras que estas mismas siglas justifican que vuestra organización mienta en todas sus comunicaciones negando la existencia de otras organizaciones no subvencionadas y además se permita hacer de policía de lo que los demás podemos manifestar, defender o criticar y qué podemos poner o dejar de poner en nuestra propaganda.
Por último queremos transmitiros que no está en nuestro ADN ni puede ser la manera de funcionar de una organización obrera el retractarse de lo que se afirma por convicción en base a amenazas, vengan de quien vengan: burgueses, fascistas, estalinistas o “anti-autoritarios”.
Asamblea General de Solidaridad y Unidad de los Trabajadores en Barcelona, 4 de Mayo de 2010